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La rosácea, o también conocida como cuperosis, es una dermatosis inflamatoria que afecta directamente los vasos sanguíneos, perjudicando principalmente el área central del rostro. Se ve reflejada por el enrojecimiento en la zona de la nariz, mentón, mejillas y frente.
Esta dermatosis tiene fases, siendo la inicial la más leve (conocida como eritema), que se identifica por el enrojecimiento de la dermis, ya que, a medida que la rosácea avanza, promueve la dilatación de los vasos sanguíneos, conocidos también como telangiectasias o arañitas vasculares.
En casos más graves, se da la formación de pápulas o pústulas, que son pequeños bultos elevados y sólidos en la piel con bordes definidos que se ven con facilidad. La aparición de esta especie de granos en muchos casos se debe a la infección de microorganismos como el Demodex folliculorum o Helicobacter pylori.
La rosácea suele aparecer entre los 30 y 50 años, es más frecuente en mujeres y puede desencadenar casos más graves en los varones. Además, en muchos casos puede causar un impacto emocional en el paciente, afectando su autoestima de manera significativa.
¿POR QUÉ SE PRODUCE?
No se tiene una causa específica de la aparición de la rosácea, pero existen varios factores que influyen en su desarrollo o incluso la agravan. Entre ellos, diversos estudios han identificado los siguientes:
- El tipo de piel
- La herencia genética
- Cambios hormonales
- La dieta
- Los cambios repentinos de temperatura
- La exposición solar
- El estrés
¿EXISTE TRATAMIENTO PARA LA ROSÁCEA?
Si bien es cierto que la rosácea es una enfermedad crónica, existen tratamientos que pueden ayudar significativamente a su mejora. Hoy en día, gracias a los grandes avances de la tecnología médica, contamos con tratamientos láser, los cuales son procesos rápidos que no requieren procesos quirúrgicos.
En ese sentido, el láser actúa destruyendo selectivamente los vasos sanguíneos, sin dañar el tejido periférico y disminuyendo significativamente los episodios bruscos de calor o ardor marcado que presentan los pacientes con rosácea. Además, el efecto térmico directo que produce el barrido láser, desinflama y desinfecta el área del rostro afectada, obteniendo mejores resultados en comparación con tratamientos convencionales.
El principal beneficio que puede obtener el paciente, es la disminución de los granos rojos del acné, atenuando el color rojizo característico de esta enfermedad. El tiempo del tratamiento podrá variar de acuerdo a la intensidad de cada caso y de la reacción de la piel de cada paciente.
En la Clínica Luméniz atendemos diariamente a diversos pacientes con casos de rosácea, quienes buscan una solución para controlarla. En ese sentido y gracias a la alta tecnología láser que utilizamos, contamos con un tratamiento exclusivo y personalizado para ayudar a lograr los resultados esperados. Si empiezas a cuidarte ahora, tu rosácea no tiene por qué avanzar a los estados más graves.
Si deseas conocer más de este tema, la Clínica LUMÉNIZ te invita a pasar por una consulta con su staff médico TOTALMENTE GRATUITA en nuestra sede ubicada en Av. Benavides 1967 – Miraflores.